Hay, sin lugar a dudas, miles de razones, no para decir que es “el mejor” de los libros nunca escritos, o “uno de los mejores” o “un grandísimo libro” o cosas tan peregrinas. Los libros no son buenos o malos. Los libros son para los lectores: si alguien lo lee y lo disfruta es un gran libro. Y El Quijote ha tenido la fortuna de encontrarse con grandes lectores (y numerosos lectores). Lo que sí podemos es dar razones para que quien no lo haya hecho acceda a sus páginas.
Por razones de espacio sólo vamos a dar las primeras 10 razones (pero si encuentras algunas de las miles que quedan en el tintero las puedes dejar en nuestras “glosas a media luz”).
1ª razón: Con El Quijote te ríes y mucho. Llega un momento en que no paras de reír y si no recuerda la aventura de los batanes o los juicios de Sancho.
2ª razón: Con El Quijote lloras. Muchas veces, pero quizá sobre todo cuando decide hacerse pastor (capítulo cincuenta y siete de la segunda parte) y te preguntas que para qué hemos luchado tanto juntos en las anteriores mil páginas de novela.
3ª razón: El Quijote está bien escrito. Pero no esperes en sus páginas oracioncitas cortas, plantillas para el análisis sintáctico o antecedentes de todos los relativos. Aquí la sintaxis hace mucho tiempo que paso a estar al servicio del mensaje.
4ª razón: El Quijote despierta la imaginación. Los gigantes se alzan sobre las páginas del libro y las cuevas son tan profundas que da hasta miedo entrar en ellas.
5ª razón: Dentro de El Quijote se cuentan otras historias. Aunque esto pasa más en la primera parte que en la segunda.
6ª razón: El Quijote siempre está de moda y no sabes por qué se reedita y salen cada año otros libros que hablan de él o lo incorporan o lo citan. Por lo que si no lo has leído no estarás “in”.
7ª razón: Los personajes de El Quijote son inolvidables. Y aquí nadie habla de los protagonistas. Hablamos de Maritormes, de la Princesa Micomicona, de Ginés de Pasamonte ─mal rayo le parta─, de los duques, del Caballero de la Blanca Luna… y hasta del mismísimo Benengeli (o Berenjena).
8ª razón: El Quijote te lleva a más sitios que la Travel Club. Así visitarás la Ínsula Barataria, Sierra Morena, la cueva de Montesinos, castillos y ventas… Y todo ello en pleno verano (que es cuando se hacen los viajes).
9ª razón: En El Quijote hay maravillas por doquier. ¿Has probado el bálsamo de Fierabrás? ¿Sabes si te cabe el yelmo de Mambrino? ¿Has leído las cartas de Sancho?, ¿y las respuestas? ¿Has montado en un barco encantado?, ¿y en un caballo que vuela?
10ª razón: (Se advierte hoy para que nadie se dé a engaño). El Quijote crea dependencia y adicción y lo más probable es que si lo terminas vuelva a leerlo y releas pasajes y busques aventuras puntuales y seas un enganchado (como yo). NO LEAS EL QUIJOTE.
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Hay en nuestra Biblioteca muchos Quijotes, pero te queríamos recomendar la edición de Ángel Basanta en Anaya (con ilustraciones maravillosas de José Ramón Sánchez). Es un volumen lo suficientemente pequeño para poder se llevado y traído, y lo suficientemente grande como para que la letra se vea hasta sin gafas.
El texto se presenta tal cual y las notas (muchas pero no demasiadas) se dejan al final para no distraer la atención.
Además de la edición de Anaya tenemos diez copias. Date prisa que solemos tener varios prestados permanentemente.
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REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA:
Autor: Miguel de Cervantes Saavedra.
Título: El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha.
Editorial: Anaya.
EN NUESTRA BIBLIOTECA PÍDELO POR SU NOMBRE:
82-2-CER-ing
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